Peligra el acuerdo del Brexit tras las renuncias de ministros de May
Dos ministros británicos, entre ellos el encargado del Brexit, renunciaron hoy en rechazo al principio de acuerdo alcanzado entre Londres y la Unión Europea (UE) para la salida del Reino Unido del bloque, en un enorme revés para la primera ministra Theresa May y para su capacidad de hacer aprobar el entendimiento en el Parlamento.
Desafiante pese a las dimisiones y a una moción de censura impulsada por su propio Partido Conservador, May defendió el acuerdo durante una tensa comparecencia ante la Cámara de los Comunes en la que rechazó pedidos de renuncia y pidió a los parlamentarios apoyar el pacto.
“La opción es clara”, dijo May, quien señaló que su responsabilidad es tomar “las decisiones correctas, no las fáciles”.
“Podemos optar por salir de la UE sin un acuerdo. Podemos correr el riesgo de que no haya Brexit en absoluto. O podemos elegir unirnos y apoyar el mejor acuerdo que puede negociarse, este acuerdo”, declaró con firmeza y descartó que vaya a ser destituida.
“¿Voy a seguir hasta el final de esto? Sí”, aseguró la primera ministra en una conferencia de prensa que dio a la tarde para contrarrestar el clima de rumores y tensión política que domina Londres.
Sin embargo, las dimisiones, que llegaron menos de un día después de que el gabinete apoyara de manera “colectiva” el borrador del acuerdo, debilitaron al máximo a May y envalentonaron a sus rivales conservadores pro-Brexit.
El diputado conservador Jacob Rees-Mogg, cabecilla del ala más euroescéptica del partido, solicitó una moción de censura contra May, es decir a una votación para decidir si sigue en el cargo, algo que podría disparar más exigencias de dimisión.
Según las reglas del Partido Conservador, se necesita que el 15% de los legisladores de la agrupación, actualmente 48 diputados, escriban una carta al presidente del grupo parlamentario de la agrupación, Graham Brady.
Rees-Mogg dijo en su carta que el acuerdo del Brexit era “peor que lo anticipado” y que May había perdido la confianza de sus legisladores.