Atacaron iglesias en Santiago de Chile y dejaron una macabra amenaza al Papa
“Las próximas bombas serán en tu sotana”, fue la amenaza. Los ataques fueron perpetrados con bombas caseras durante la madrugada.
Tres días antes de que el papa Francisco aterrice en Chile, en Santiago se registraron ataques con bombas caseras contra tres parroquias de la Iglesia Católica. En uno de ellos, ocurrido en la comuna de Estación Central, se halló un panfleto elaborado en una computadora, que contiene una amenaza contra la presencia del jefe del Estado Vaticano en Sudamérica: “No nos someteremos jamás al dominio que quieren ejercer sobre nuestros cuerpos, nuestras ideas y actos, porque nacimos libres de decidir el camino que queramos tomar. Contra todo religioso y predicador. Cuerpos libres, impuros y salvajes. Atacaremos con el fuego del combate haciendo explotar su asquerosa moral. ¡Libertad a todos los presos políticos del mundo! ¡Wallmapu libre! Autonomía y resistencia. Papa Francisco, ¡las próximas bombas serán en tu sotana!”.
Carabineros de Chile y la Policía Civil (PDI) investigan si en los tres ataques explosivos hubo coordinación entre grupos. El último fue cerca de las cuatro de la madrugada en la comuna de Peñalolén, en la iglesia Cristo Vencedor. En ella lanzaron un artefacto que rompió parte de la puerta principal. En el interior del templo se hallaron restos de un matafuegos y trozos de plástico.
Cuatro horas antes, en Estación Central (donde se encontró el panfleto), la parroquia Santa Isabel de Hungría fue blanco de un ataque con una bomba incendiaria que estalló en el frontis y dejó daños visibles en la entrada.
El párroco de esa iglesia, Fernando Ibáñez, dijo que los vecinos vieron a dos mujeres y dos hombres huir del lugar. Ibáñez contó que estaba durmiendo en el templo cuando sintió un ruido “y al mirar por la ventana vi que estaba ardiendo la puerta. En ese momento los vecinos gritaban que se estaba incendiando el templo (...), apagamos el fuego con mangueras. Esto llama la atención, no es el camino, no conduce a nada”.
El otro ataque fue simultáneo con el de Peñalolén (sector cordillerano de la capital chilena) y ocurrió en Recoleta, una comuna muy cercana al centro de Santiago. En la iglesia Emmanuel, otro explosivo dejó con daños el ingreso. También en este lugar se hallaron restos de un matafuegos.
“Esta iglesia fue hecha con los esfuerzos de la gente de la población. Llegué cuando el padre estaba tratando de apagar el fuego y llegaron los bomberos”, relató un testigo del ataque en Estación Central a la Radio Bío Bío. El comandante de Carabineros Gonzalo Araya contó que los vecinos vieron a más de una persona en el interior de la iglesia Santa Isabel de Hungría, que dejaron los panfletos y que luego huyeron del lugar. También dijo que no había heridos ni detenidos. El sacristán confirmó esa información y agregó que fue “una bomba de ruido. No veo una explicación, hay formas y maneras de protestar, pero no haciendo daño”.
Por otro lado, ayer a la mañana, en el centro de Santiago y muy cerca de otra iglesia, fue encontrado un bidón con acelerante que no alcanzó a ser encendido.
La presidenta chilena, Michelle Bachelet, fue consultada por los ataques en una entrevista y dijo que “esto es muy extraño, porque no es algo que uno pueda identificar como un grupo específico, se llama algo así como ‘por los cuerpos libres’ (...)”. “En democracia la gente puede expresarse mientras lo haga de manera pacífica y adecuada”, agregó.