Mar del Plata: Autoritarismo de Montenegro

El intendente de Mar del Plata mantiene un largo enfrentamiento con el gremio municipal que se profundizó en los últimos días por una serie de medidas de fuerza que lanzó el sindicato en reclamo de un aumento salarial del 35%. Y en el medio del conflicto, jugó una carta fuerte: impulsó un proyecto que declara “esencial” la labor de todos los empleados para que no puedan volver a realizar paros. El alcalde del PRO justificó la medida en que “cada una de las personas que trabaja en el Estado tiene una responsabilidad enorme que es prestarle servicio a los vecinos, y esta responsabilidad no se puede frenar por una medida de fuerza”.

“Mi rol es asegurarme que los marplatenses reciban los servicios y la atención por la que pagan sus impuestos. Porque acá hay algo que está muy claro: la patronal en el caso de los empleados públicos no es un gobierno, son los vecinos. Y cuando hacen paro no me lo están haciendo a mí, están tomando de rehenes a todos los marplatenses”, sostuvo.

En los fundamentos de la ordenanza que envió al Concejo Deliberante, el jefe comunal justificó su decisión en que “el concepto de servicio público esencial es dinámico y ha ido evolucionando en función del rol que se le otorgaba al Estado, de las complejidades de las tareas desarrolladas y de ser el gestor del interés general, hasta el día de hoy, donde podemos considerar que todas las funciones desarrolladas por el Estado resultan esenciales para el ejercicio de los derechos por parte de la ciudadanía”.

El anuncio llegó una semana después de definir por primera vez el descuento de los días de paro que hicieron los empleados en el marco de una discusión salarial. En medio del conflicto, Montenegro eliminó un beneficio que gozaban los agentes municipales desde 2001 y que consiste en un premio por presentismo al cual ya no podrán seguir accediendo quienes se sumen a paros. Consiste en quince días anuales de licencia con goce de íntegro de haberes.

COMENTARIOS