La exgobernadora de Carolina del Sur y exembajadora ante la ONU, Nikki Haley, anunció ayer su precandidatura a presidenta de Estados Unidos, que la enfrentará a su exjefe Donald Trump en la interna del Partido Republicano.
“Usted debe saber esto de mí. No tolero a los matones. Y cuando se les devuelve la patada, les duele más si estás usando tacos. Soy Nikki Haley y seré candidata a presidenta”, dijo Haley, de 51 años, en un video. Haley, quien fue gobernadora de Carolina del Sur y embajadora ante la ONU designada por Trump, había dicho hace dos años que no desafiaría a su exjefe en la interna republicana para definir el postulante a Casa Blanca en las elecciones generales de 2024.
Pero cambió de opinión en los últimos meses y argumentó que su giro se debía, entre otras cosas, a los problemas económicos del país y la necesidad de un “cambio generacional”, en aparente alusión a los 76 años que tiene Trump.
Su lanzamiento como aspirante a la Casa Blanca era esperado desde hace varias semanas. El miércoles pasado había prometido un “anuncio especial” para sus seguidores en Charleston, Carolina del Sur, donde fue gobernadora entre 2011 y 2017. Haley dijo en el video que los republicanos han perdido el voto popular en siete de las últimas diez elecciones. “Eso tiene que cambiar”, proclamó según la agencia de noticias Europa Press. Haley habló en favor de la “responsabilidad fiscal” y el refuerzo de la seguridad fronteriza, criticó a la “izquierda socialista” que quiere “reescribir la historia” y, en particular, al presidente estadounidense, el demócrata Joe Biden.
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